Hamás aceptó liberar a los rehenes israelíes “vivos o muertos”
El conflicto ya provocó la muerte de 66.055 palestinos, en su mayoría civiles.
Viernes, 03 de octubre de 2025
Hamás dio un paso inesperado en medio de la guerra con Israel. La organización terrorista comunicó que acepta el plan de 21 puntos impulsado por Donald Trump para la Franja de Gaza y que está dispuesta a liberar a todos los rehenes israelíes “vivos o muertos”.
El anuncio fue transmitido a través de la cadena qatarí Al Jazeera, que citó fuentes vinculadas a los mediadores internacionales.
La respuesta formal marca la primera señal pública de que Hamás ha puesto sobre la mesa una posición concreta frente a la iniciativa del presidente estadounidense.
Según el comunicado, el grupo agradeció los esfuerzos de actores árabes, islámicos e internacionales, así como los del propio Trump, y afirmó que está dispuesto a negociar los detalles del acuerdo de paz.
También reiteró su intención de ceder la administración de Gaza a un organismo palestino de tecnócratas independientes.
Rehenes en Gaza: la deuda pendiente
La liberación de rehenes sigue siendo uno de los puntos más sensibles del conflicto.
Desde el ataque del 7 de octubre de 2023, Hamas mantiene cautivas a 251 personas, aunque según cifras oficiales de Israel, solo 48 permanecen en Gaza. De ellas, al menos 25 estarían muertas. Entre los secuestrados hay cuatro ciudadanos argentinos.
El ataque inicial dejó 1.219 muertos en Israel, en su mayoría civiles. A partir de ese momento, el gobierno de Benjamín Netanyahu desplegó una ofensiva masiva sobre Gaza que, de acuerdo con datos del Ministerio de Salud del enclave palestino —considerados fiables por la ONU—, ya provocó la muerte de 66.055 palestinos, también en su mayoría civiles.
El rol de los mediadores y el impacto político
El gesto de Hamás busca abrir una nueva fase de negociación a través de mediadores internacionales.
El plan de Trump propone un rediseño político y administrativo en Gaza, con participación de organismos palestinos independientes, en un intento de encontrar un punto de equilibrio entre seguridad y gobernanza.
Para Israel, la propuesta llega en un momento crítico. Las familias de los rehenes mantienen una presión constante sobre el gobierno de Netanyahu, reclamando soluciones rápidas.
La posibilidad de que parte de los cautivos ya estén muertos genera aún más tensiones dentro de la sociedad israelí.
El futuro del acuerdo dependerá de las próximas rondas de negociaciones y de la voluntad real de ambas partes para avanzar.
Mientras tanto, la guerra en Gaza sigue dejando un saldo devastador, con miles de muertos y una crisis humanitaria sin precedentes en la región.
Fuente: El Litoral